miércoles, 30 de noviembre de 2011

Arde como Cigarro!!!

Estuve sentado en el suelo durante unas cuatro horas, haciendo arder mis ideas como cigarrillos cada veinte minutos, y como el humo, venían claramente a mí para luego irse dispersando hasta desaparecer de mi vista. Y cada cerilla encendida era como la chispa que como todo lo que hacemos,te mantiene entre mis pensamientos. Es una mala analogía compararte con un vicio; debe ser malo porque todos lo rechazan, todos le temen, todos odian el vicio. Pero, así como lo odian, otros lo aman, otros lo hacen, otros también arden en lo prohibido. Entonces yo prefiero decir que no es malo, solo un tipo de analogía distinta, propia del amor clandestino, del amor diferente. En dado caso, ¿Sería justo que para que la sociedad me viera con otros ojos, con otra cara, debería no fumar, debería estar sin ti? ¿Sería justo renunciar a lo que yo quiero, solo por el gusto y placer que les provoca a otros? Prefiero arder con mis cigarros, con tu cuerpo, con tus labios, con mis sueños de dormir en tu regazo. Prefiero ser el señalado, el comentado, por tener un vicio en los labios, tus besos, mis cigarros, tus dedos en mis manos. Me importará un bledo que me griten improperios, me adulará el que nos miren de reojo, alimentemos el morbo de los metiches, quédate en mis pensamientos, quédate en mi cuerpo, te respiraré, serás parte de mí una y otra vez, ardiendo desde adentro como humo fatal para la vista de los demás y para el placer mío.